5 de diciembre de 2015

Refugio

Hace ya unos meses recibí un mensaje que me alegró el día. Y, aunque haya pasado tiempo, lo tengo presente; no era un buen día y me lo cambió. Fue como un pequeño refugio para mi.

Todos tenemos un refugio -o refugios- donde acudir cuando las cosas no parecen ir como debieran. Para algunos ese refugio será la familia, para otros los amigos o el deporte. Quizás, para otros, sea la montaña. Para algunos, como yo, es un compendio de todo eso, aunque no en ese orden -puede que por equivocación-.

La terraza del Elola, hace ya un buen tiempo.
También, a veces, uno busca refugio en uno mismo. Es otra manera de encontrar cobijo; pero, quizás, aunque haya momentos donde sea necesario, esa opción no sea la más recomendable de mantener.

La antigua Cabaña Tracuit, un rincón curioso de los Alpes
Incluso los refugios derruidos pueden servir de ayuda. Refugio del Rey, Gredos.
Si olvidamos lo anterior y nos ceñimos al nivel semántico, refugio, según nos cuenta la R.A.E., tiene, entre otros, los significados de "asilo, acogida, amparo" y "Lugar adecuado para refugiarse"Un lugar, unas personas, un tiempo que hacen que todo quede atrás y que, aunque sea por una noche, olvides los miedos que provoca estar ahí fuera.


Refugio de Pombie. Un pequeño hospicio a los pies del Midi d'Ossau.


Refugio Victory, siempre vigilante en Galayos.
Pero, nos refiramos a lo que nos refiramos y nos refugiemos donde nos refugiemos, siempre hay que volver hacia aquello de lo que nos estamos refugiando. No hay otra. Permanecer demasiado tiempo en ellos puede ser reconfortante y necesario, pero no elimina que tendremos que enfrentarnos a lo que hay fuera. Sea lo que sea.

Colomers, un pequeño rincón de Aigüestortes

La Tête Rousse. Lo imaginaba más grande, siendo un refugio de la normal del Mont Blanc

Incluso una pequeña lona puede refugiarte de una fría noche.
Porque, aunque hay muchos tipos de refugios -algunos más útiles y otros menos-, siempre deben ser cobijos transitorios.  Así. sólo queda entender cuándo usar cada uno de ellos y cuándo dejarlos. Tarea difícil, sin duda. 
Y vuelta a empezar. ¿Cuál es tu refugio?

"Moneda que está en la mano
quizá se deba guardar: 
la monedita del alma
se pierde si no se da"  

Consejo - Antonio Machado 

No hay comentarios:

Publicar un comentario